La piel de tu recién nacido tiene características esenciales que le ofrecen una protección única frente al mundo, pero también es más delicada de lo que imaginas, requiriendo algunos cuidados especiales. Es por eso que reunimos todo lo que necesitas saber sobre su cuidado, para que puedas pasar más tiempo disfrutando de su amor.
Protégela contra el mundo exterior
Tu bebé tiene una piel 30% más delgada que la de un adulto y puede perder hidratación rápidamente, es por esto que tiende a ser más irritable, necesitando más protección mientras se adapta a este nuevo mundo. ¿Sabías que casi tres de cada cuatro bebés tienen sarpullidos? Normalmente se curan solos, pero hay algunos productos que ayudan a protegerlas e hidratarlas como la nueva línea JOHNSON'S® para recién nacidos, siendo productos puros y suaves, seguros para ser usados desde el primer día de vida.
La costra láctea
Seguramente te habrás dado cuenta que tu bebé presenta algunas costras parecidas a una mancha. Esta son las costras lácteas o dermatitis seborreica - un problema de la piel que suele aparecer en el cuero cabelludo o las cejas. Esta condición es bastante común y puede comenzar en las primeras semanas de vida durando normalmente, semanas o meses. Prueba realizando un suave masaje con JOHNSON'S® Crema Hidratante para recién nacidos así ayudarás a reducir este problema.
Los beneficios del masaje para tu bebé
El tacto es nuestro primer idioma al nacer, es por esto que en muchos hospitales y salas de maternidad ubican a los recién nacidos sobre el pecho de su mamá para tener el máximo contacto piel con piel. El toque suave y amoroso les ayuda a crecer fuertes y menos ansiosos, además un suave masaje ayuda a calmarlos, trayendo grandes beneficios como: reducir el llanto, mejorar la digestión, aliviar cólicos, gases y estreñimiento, mejora la adaptación al sueño durante la noche, además de ayudarlo a dormir profundamente.
Tips para darle un buen masaje a tu bebé
Ahora que ya sabes los beneficios de masajear a tu bebé, conoce estos simples consejos que pueden hacer la diferencia para disfrutar de ese momento único con tu pequeño.
1. Elije un momento en que esté despierto y alerta, sin hambre o sin haber acabado de comer para evitar mañitas.
2. Encuentra un lugar cómodo para hacer el masaje, procura que no esté fría y no tenga una luz muy fuerte que pueda incomodarlo, para que además pueda ver tu rostro claramente.
3. Lava tus manos, sacate las joyas y cuida que tus uñas estén cortas.
4. Ten a la mano todo lo que necesitas para que no tengas que interrumpir el masaje: crema líquida, toallitas, pañales, ropa limpia, etc.
4. Antes de comenzar, relájate con algunas respiraciones profundas, esto ayuda a que tu guagua también ser relaje.
Recuerda que los bebés cambian todo el tiempo, algunos pueden sentirse más seguros si están cerca de sus padres, además los pequeños que tienen rutinas de tacto tienen tres veces más posibilidades de tener una expresión general positiva que los bebés que no la reciben. No olvides aplicar alguna crema líquida como los productos que tiene JOHNSON’S® para masajear a tu bebé y que tus manos se deslicen suavemente sobre su piel.